domingo, 18 de agosto de 2019

CASTILLO DE PRAGA Y CATEDRAL DE SAN VITO


Praga es una ciudad bellísima. Pequeña, tranquila, acogedora.  Vale la pena  un recorrido a lo largo de sus calles curvilíneas y empedradas, beber una rica y fresca cerveza  en alguno de sus bares o en una plaza y observar, descansar, disfrutar. Praga, no hay dudas, te enamora.
Si visitas Praga uno de estos días, te cuento que hay un lugar que no podes dejar de conocer. Me refiero al Castillo de Praga y su imponente Catedral.
Empecemos diciendo que el Castillo de Praga (Prazký Hrad) es el castillo más grande del mundo y todo un símbolo para los checos. Es una fortaleza que se encuentra en la cima de la colina de  Hradcany y es residencia del Presidente de República Checa. El príncipe Borinoj de la casa de Bohemia hizo construir en ese lugar una fortaleza de madera hacia fines del siglo IX. Luego, el Castillo se convirtió en la capital del Sacro Imperio Romano Germánico y buena parte del mismo fue reconstruido. Hacia 1918, el castillo de Praga se convirtió en residencia del presidente de República Checa, y su despacho se encuentra también allí. Desde el Puente de Carlos se lo ve asomar imponente en la orilla opuesta. 
Dentro del Castillo hay un montón de edificios y patios para recorrer y disfrutar, por lo que visitarlo completamente puede llevar algunas horas. 
  • Antiguo Palacio Real: es el palacio de madera construido en el siglo IX
  • Basílica y Convento de San Jorge: Actualmente contiene una colección de arte Bohemio del siglo XIX
  • Torre Daliborka: cárcel que, al principio, reclutaba a los miembros de la nobleza, pero que más tarde se convirtió en cárcel de presos comunes
  • Torre Blanca: esta se convirtió en la cárcel de la nobleza
  • Torre de pólvora: Construida en el siglo XV como parte del complejo del Castillo.  El Rey Rodolfo  II la hizo construir para usarla como laboratorio, y en ella los alquimistas buscaban la piedra filosofal
  • Callejón de oro: sucesión de casitas de colores que, otrora, fueron las viviendas de los orfebres del Castillo.  Hoy en ellas se venden artesanías. En una de las casas, la número 22, vivió Frans Kafka 
  • Catedral de San Vito:  es, sin duda, la parte que más me gustó del Castillo. Es la catedral gótica de Praga. Tiene una ubicación privilegiada en el Castillo, y sus inmensas agujas sobresalen y son  visibles aun desde la orilla opuesta del río Moldava. Originalmente ese lugar era un sitio de culto pagano.  El Rey Wenceslao resolvió entonces construir en ese sitio  una rotonda que dedicaría al culto de San Vito (svaty Vít). Cuando Praga fue declarada archidiócesis en 1344, se comenzó la construcción de la Catedral, cuyo arquitecto, Mathieu  dÀrras murió al poco tiempo.  Fue entonces cuando el rey Carlos IV encargó su continuación a Peter Parlér, pero una sucesión de guerras interrumpieron su finalización, la que se concretó en 1929. En su interior se pueden apreciar las joyas de la  Corona de Bohemia, el sepulcro de Wenceslao, y la cripta Real, en la que se hallan enterrados Carlos IV, Wenceslao II y Rodolfo II entre otros reyes.  También se encuentra en la Catedral la tumba de San Juan Nepomuceno, cuya estatua está en el puente de Carlos. Juan Nepomuceno era el sacerdote confesor de la casa real. La leyenda cuenta que, sospechando el rey Wenceslao IV de Bohemia que su esposa Sofía de Baviera le era infiel, intimó a Nepomuceno a que le contara los secretos de confesión de la reina.  Como Nepomuceno se negó a romper el secreto de confesión, el sacerdote fue atrapado y tirado al río, donde se ahogó. Cuando, más tarde ,se  recuperó su cuerpo, notaron con gran asombro que todo su cuerpo estaba en avanzado proceso de deterioro, menos su lengua, que estaba intacta.  Esto fue visto como una señal y un milagro y por lo tanto fue santificado. La Catedral de San Vito, al igual que todas las catedrales góticas, posee enormes dimensiones, altas agujas, vitreaux increíblemente bellos (todos menos uno son verdaderos vitreau, habiendo sólo uno está pintado) y un fabuloso rosetón.
.














HORARIOS Y PRECIOS
El Castillo de Praga puede ser visitado por cuenta propia o en visita guiada. 

Castillo
de abril a octubre : todos los días de 5:00  a 24:00
de noviembre a marzo: todos los días de 6:00 a 23:00
Jardines del Castillo:
de abril a octubre : todos los días de 9:00  a 18:00
de noviembre a marzo: todos los días de 9:00 a 16:00
Palacio Real
todos los días de 10:00 a 18:00
Convento de San Jorge
de abril a octubre : todos los días de 9:00  a 18:00
de noviembre a marzo: todos los días de 9:00 a 16:00

 Gran parte del Castillo, como los patios, la Catedral de San Vito y la Basílica de San Jorge, se pueden recorrer de manera gratuita.  Pero para recorrer el interior del mismo hay que comprar un ticket.  Hay dos clases de tickets:
- 250 coronas: permite acceso a Basílica de San Jorge, palacio Real, callejón de oro y torre  Daliborka
- 350 coronas: incluye lo anterior mas el Convento de San Jorge y la torre Powder.


Es muy interesante ver el cambio de guardia que se hace cada hora. Además, al mediodía, va acompañado de fanfarria y ceremonia de la bandera en el primer patio










 Catedral de San Vito
el ingreso es gratuito
de marzo a octubre :  de 9:00  a 18:00. lunes a sábado
                                   de 12:00 a 18:00 domingos     
de noviembre a febrero:  de 9:00 a 16:00 lunes a sábados
                                        de 12:00 a 16:00 domingos


Son imperdibles las vistas que se tienen de la Ciudad desde el Castillo. Los techos rojos característicos  ameritan  algunas fotos. Te sugiero que, al finalizar el recorrido por el Castillo regreses a la ciudad por la calle Nerudova.  La misma lleva ese nombre en honor a Jan Neruda, famoso escritor y periodista checo que vivió en esa calle.  Pablo Neruda, el escritor chileno, tomó su nombre a su vez del escritor checo. Esta calle es una de las más bonitas y pintorescas de Praga.  Está llena de restaurantes, bares y negocios. Lo más llamativo de la calle, además del entorno, es que en la época antigua la gente no sabía leer ni escribir, por lo que las casas, en vez de números, tienen emblemas que las identifican.  Por ejemplo, la de los dos soles (en la que vivió Neruda), la del león rojo, la de la llave dorada, la de los tres violines, etc.

El Castillo de Praga y la Catedral de San Vito son los imperdibles de la capital Checa.  No te los pierdas !!























No hay comentarios.: